lunes, 24 de octubre de 2011

VIDEO!!***

te amo mi vida

Sabes, apesar de todo el tiempo que llevamos aun no me canzo de decite que eres es lo más increíble que me pudo haber pasado. Gracias por enseñarme que se puede volver a comenzar y que cada palabra en una relación tiene un ¡gran valor! Quizás el miedo de volver a perder me cegó por un tiempo y no veía realmente el mega-niño que tenía a mi lado.
Prometo valorarte en cada momento que estemos juntos, hacerte el chico más feliz del mundo regalarte sin reparo mi corazón.
Si supieras todo lo que me hacen sentir tus caricias, tus te quiero, tus te amo, en fin, son detalles tan perfectos que ya no sabría que hacer si algún día no los llego a escuchar.
Gracias por dejarme saber que existes… sólo quiero imaginar i crear un mundo donde sólo existamos tú y yo.
Te amo mi vida!!

mis amigos

No puedo darte soluciones para todos los problemas de tu vida, ni tengo respuestas para tus dudas o temores; pero puedo escucharte y buscarlas junto contigo.
No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro; pero cuando me necesites estaré junto a ti. No puedo evitar que tropieces. Solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.
Tus alegrías, tus triunfos y tus éxitos no son míos; pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz. No juzgo las decisiones que tomas en
la vida. Me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides.
No puedo trazarte límites dentro de los cuales debes actuar; pero sí te ofrezco el espacio necesario para crecer. No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parta el corazón; pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo. No puedo decirte quién eres, ni quién deberías ser. Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo. En estos días oré por ti. En estos días me puse a recordar a mis amistades más preciosas. Soy una persona feliz: tengo más amigos de lo que imaginaba. Eso es lo que ellos me dicen, me lo demuestran. Es lo que siento por todos ellos. Veo el brillo en sus ojos, la sonrisa espontánea y la alegría que sienten al verme. Y yo también siento paz y alegría cuando los veo y cuando hablamos; sea en la alegría o sea en la serenidad.
En estos días pensé en mis amigos y amigas y entre ellos, apareciste tú. No estabas arriba, ni abajo, ni en medio. No encabezabas ni concluías la lista. No eras el número uno, ni el número final. Lo que sé es que te destacabas por alguna cualidad que transmitías y con la cual desde hace tiempo se ennoblece mi vida. Yo tampoco tengo la pretensión de ser el primero, el segundo o el tercero de tu lista. Basta que me quieras como amigo.
Entonces entendí que realmente somos amigos. Hice lo que todo amigo; oré, y le agradecí a Dios que me haya dado la oportunidad de tener un amigo como tú. Era una oración de gratitud, porque tú le has dado valor a mi vida.